¿Tienes en mente realizar una actividad comercial en Panamá y no sabes por dónde empezar?

Todo negocio o empresa se crea y opera condicionado al cumplimiento de lineamientos establecidos en la normativa legal vigente de determinado país, conforme a la actividad comercial a la que se dedicara el negocio o empresa. Por lo tanto, la inobservancia e incumplimiento de la legislación aplicable puede actuar como limitantes para la constitución y crecimiento de un negocio o empresa cuando afectan de manera negativa a quien realiza la inversión. 

Pues te comento que, el único proceso requerido para el inicio de una actividad comercial o industrial en el territorio de la República de Panamá, es mediante la obtención de un aviso de operación, pero este no se limita a la realización de diversas gestiones que complementada a la adquisición de un aviso de operación constituyan una adecuada formalización en apego a las normativas vigentes para formalizar tu actividad. 

Las sociedades anónimas se han convertido en una opción fuertemente atrayente para los que buscan proteger su patrimonio y proporcionar un giro completo a sus negocios, optando por la regularización de los negocios o emprendimientos, a través del cumplimiento y apego formal de las leyes.

Panamá cuenta con normativas jurídicas favorables para la inversión. Tal como se establece en su legislación vigente sobre la materia, el país promueve y protege la inversión realizada en todos los sectores de la actividad comercial, propiciando la creación y el establecimiento de negocios o empresas, a través de diversas formas de personas jurídicas (Sociedades Anónimas, Sociedades de Responsabilidad Limitada, Sociedades en comanditas, Sociedades de emprendimiento), o como persona natural, pero no todas se adecuan a nuestros intereses y necesidades. Al pasar de los años se han ido reglamentando los trámites para la apertura de negocios y empresas, a través de la digitalización, permitiendo la eliminación de parte de la burocracia gubernamental conforme a las reformas fiscales y comerciales.

En consecuencia, no está al arbitrio de ninguna institución de la Administración Pública o de gobierno local, exigir permiso, licencia, visto bueno, o aprobación alguna como requisito para iniciar o ejercer una actividad comercial, salvo las excepciones taxativamente establecidas por ley.

Por otra parte, es de conocimiento que dentro la diversidad de personas jurídicas que existen en la legislación panameña para el establecimiento de un negocio o empresa, la más empleada es la Sociedad Anónima y una de sus principales ventajas al realizar actividades comerciales o industriales, a través, de su personería jurídica, radica directamente en los beneficios que alberga a sus propietarios y a los activos de la sociedad, permitiendo la distinción y determinación del patrimonio de la empresa o negocio (capital social), de los bienes personales de sus socios, y así, delimita el alcance de la responsabilidad patrimonial de la persona jurídica en comparación al de realizar la actividad a título de persona natural, exceptuando las responsabilidades penales que por ley se disponga.

Recientemente en Panamá fue aprobada la ley de sociedades de emprendimiento, siendo esta dirigida a fomentar la cultura del emprendimiento en el país, creando un nuevo tipo de persona jurídica, a muy bajo costo y sin determinada burocracia dilatoria con procesos que antes ocupaban mucho tiempo para el emprendedor, a fin de que sea utilizada como el vehículo jurídico que facilite la formalización de empresas en el país.

Finalmente, en el entorno general es conveniente considerar aspectos que influyen ampliamente al momento de crear y operar un negocio o empresa como lo es el económicos, demográficos, geográficos. Siendo necesario analizarles para tomar decisiones acertadas y anticiparse a posibles cambios, de manera que sea factible la aplicación de estrategias necesarias que permitan la adaptación para tales cambios. 

Entre otros aspectos a considerar en la formación o creación de negocios o empresas en Panamá y que no dejan de ser importantes al momento de decidir, y los cuales, se encuentran muy ligados al mercado donde se desarrollará la actividad, teniendo a priori, definir la manera de como aparecerá o se presentara a la vista del consumidor el negocio, emprendimiento o empresa determinando los aspectos importantes del mercado como podrían incidir: la competencia, cliente, proveedores, mediante un exhaustivo análisis de mercado.

El mercado constituye un factor de suma importancia, ya que inciden en el logro de tu emprendimiento, empresa o negocio y va muy de la mano del aspecto social y cultural, debido a que refleja la forma de pensar y actuar de los posibles clientes y ello resulta de la manera en que es administrado el recurso, las acciones corporativas y en las estrategias a tomar en cuanto a la actividad comercial a la que se dedicará el negocio o la empresa.

Lo social y cultural marca tendencias que la empresa debe seguir para mantener la aceptación y la aprobación en el mercado que se desenvuelva.

La búsqueda de la excelencia para el servicio dentro de determinado negocio o empresa se encuentra definida por los estándares de calidad con los cuales debe cumplir como referencia para medir los niveles de aceptación con respecto a la actividad comercial a desarrollar.

Por otro lado, un Plan de Negocio es una herramienta que permite guiar el accionar del equipo directivo y técnico para poner en práctica la idea de negocio. Contiene las directrices que utilizará el equipo de trabajo o el emprendedor individual, con especificaciones definidas según las áreas temáticas de dicho plan.

Si usted es un emprendedor y desea conocer más o repasar algunas de estas iniciativas y cómo pueden ayudarle, puedes contactarme y como abogado en Panamá te guiare y orientare en tu paso a paso en la creación de tu emprendimiento y negocio.